Distancia: 32 kms.
Señalización: mal, obras del AVE, desaparece el Camino, hay que realizar un gran rodeo por la carretera.
Sobre las 7 de la mañana subimos hasta la Plaza Mayor y frente a la puerta occidental se desciende hasta ver un mojón que nos indica el Camino, llegamos hasta el rio Castro que se cruza por un puente medieval.
Seguimos caminando paralelos a la N-525, se coge un camino a la derecha que va entre robles y castaños. Cruzando la Autovía se llega a la población de “Requejo” donde realizamos un descanso. Nos sentamos en un Bar donde pedimos unos bocatas de tortilla.
Seguimos por una pista, rodeados de castaños, cruzamos varios arroyos. El paisaje es muy bonito, con una vegetación muy espesa.
El camino de ascenso a Padornelo está cerrado por las obras del AVE, una vez dentro de las obras seguimos hacia la derecha por el camino que han habilitado hasta llegar a una nave abandonada, donde hay una indicación que nos indica el resto del camino tradicional, que todavía queda y empezamos a ascender hasta llegar a la antigua carretera y al Alto de Padornelo.
Comenzamos a descender hasta la N-525 entrando a Padornelo, donde a la entrada en un Bar tomamos agua y Aquarius para reponer fuerzas, pues la subida ha sido larga y con mucho calor. Seguimos todo el rato por la carretera hasta llegar a “Acibaros” y cruzamos el pueblo siempre por asfalto.
La llegada a Lubian se hace larga, vemos algunas fuentes de agua y ahí nos refrescamos. Al fin llegamos sobre las 3.30 de la tarde, el albergue estaba bien. Fuimos a comprar a la tienda del pueblo y en la cocina nos hicimos unos macarrones con bonito y tomate para cenar con una botella de vino. También compramos para el desayuno magdalenas, leche y sobres de Nescafe.
Volvimos a ver a nuestro amigo Irlandés y a una mujer Canadiense que venía desde Sevilla. La noche transcurrió tranquila pues en el Albergue éramos solo 7 personas.
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